Paquito Aranda

En la ciudad de Paso de los Libres, donde el viento corre sin apuros, nació él músico conocido por todos como “Paquito” Aranda. Recorrió distintos lugares reforzando sus conocimientos sobre el bandoneón, integrando distintos conjuntos hasta llegar a nuestros días con su propia formación. Tal vez como un correlato de la vegetación exuberante, que corre sin pausa en la costa del río Uruguay, los músicos de estas tierras también brotan con su virtuosismo desbordante.
En el Paraje Ombucito, de la localidad de Paso de los Libres de nuestra provincia, nació José Octaviano “Paquito” Aranda. Según la tradición oral, el sol estaba con cierto esplendor el 17 de Mayo de 1936, ese día nació el músico. Desde su tatarabuelo hasta él todos llevan el mismo nombre, sin embargo, “Paquito” es un derivación de Pascual, fue idea de su madre porque nació el día del Santo Músico Pascual Bailón.
El padre de “Paquito” Aranda ejecutaba guitarra, acordeón y mandolina; su madre en cambio, Irene Zacarías, ejecutaba acordeón. Su hermano dejo en su casa un bandoneón, cuando fue llamado al servicio militar.
Cuando “Paquito” Aranda tenía 14 años tomo por primera vez un bandoneón. En su casa el instrumento pertenecía a su hermano, quien le prometió que le regalaría el bandoneón si el lograba una buena interpretación. Su hermano al terminar el servicio militar obligatorio cumplió su promesa, ya que el joven comenzaba a destellar rayos de virtuosismo.
En la tierra de la costa del río Uruguay comenzó la vida musiquera del bandoneonista, en compañía de Claudio Ferraris y Ramón Pérez, y como guitarrista el paraguayo José Dávalos. Este movimiento surge en la vieja LT 12, señera AM de la ciudad de Paso de los Libres. Cuando la juventud marcaba su rostro y sus ojos revelaban los sueños del músico, “Paquito” Aranda desembarca en Buenos Aires. Muy pronto consigue actuar con el conjunto de Damián Cena, con quien llega a grabar por primera vez.
En el 69 ya integra su conjunto con el Dúo Solís – Acosta. En 1971, al desvincularse Acosta, se suma Horacio Cejas formando el Dúo Cejas – Solis, hasta el año 1976 junto al director “Paquito” Aranda. Posteriormente en 1977 se incorpora la primera guitarra de Antonio Niz y el dúo Pérez – Gamarra, con quienes graba notables placas discográficas.
El acordeonista que lo acompaña desde el año 1969 hasta 1990 fue Pedro “Pepinos” Gómez, durante veintiún años, conformando un ensamble instrumental de excelencia.
Con más de veinticinco discos de larga duración como Director, y diez con diferentes interpretes, “Paquito” Aranda se ha trasformado en un auténtico creador chamamecero. Es autor y compositor de más de 300 temas, acreedor del “Disco de Oro” y en los últimos años se ha dedicado a la enseñanza de instrumentos como el acordeón, el bandoneón, guitarra y contrabajo, instrumentos que ejecuta con gran capacidad.
En el transcurso del año 2005, en el mes de noviembre, en el Salón Amarillo de Casa de Gobierno de la Provincia de Corrientes, “Paquito” Aranda recibió un reconocimiento oficial por parte del Ejecutivo. En dicha ocasión se presentó con su formación actual, Oscar Playuk en acordeón, Fredy Acevedo en primera voz y guitarra y Rolando Barrios, en voz y guitarrón.

Fuente; Enrique Piñeyro y FM Juventud